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29 de julio de 2007

He aprendido

He aprendido a ser humilde
Por el ejercicio de no tener nada;
Pero esto no es suficiente
Hace falta un corazón diligente,
Con aprehensión aparente
Y verdad consecuente,
Además, sin pecar de soberbia,
Hace falta un alma como la mía,
Dispuesta a amar.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Si todos supiéramos ser humildes que bello seria nuestro andar

Orgullo debes sentir por poseer esa cualidad

Ya que así podrás decir que sabes realmente amar

Aunque para innumerables eso sólo sea una necedad

O quizás no se den cuenta de su apócrifo actuar

No soy muy buena rimadora pero en estos burdos versos sólo quiero demostrar mi afecto y respeto hacia ti, querido amigo.

Te Quiero.

Nidesca dijo...

si el alma está dispuesta a amar las tormentas serán más llevaderas.

abrazos

Anónimo dijo...

klaptifery....

de verdad estas dispuesto a amar?
no tienes miedo?
te sientes solo?

lindo lo q escribiste sip
saludos
q estes bien y cuidate arto

xau

Lágrima del Guadiana dijo...

¿Cómo se consigue un corazón diligente, Arjex? El mío me desobecede siempre...